Luego de los escándalos generados por la entrega irregular de terrenos y los lobbies por una petrolera –que involucran a los dos secretarios de su partido, uno de ellos de licencia –, el parlamentario aprista Javier Valle Riestra considera que el Apra está en su momento más crítico.
¿Cuál es su opinión sobre la crisis que vive el Partido Aprista?
El partido ha dejado de ser un movimiento con posibilidades presidenciales. Ante la falta de un caudillo nacional, el Partido Aprista no tiene más destino que ser como el mariateguismo: un movimiento ideológico, pero sin concreción partidaria poderosa, o un partido parlamentario, que solo puede llegar a ser una gran fuerza en el Congreso.
¿Su visión está ligada a las acusaciones que se han hecho a sus dos secretarios generales?
La bicefalía ha sido muy mala. Ha acentuado las luchas intestinas en el partido y las críticas del antiaprismo. Víctor Raúl decía que había que despresidencializar la Presidencia de la República. Pues bien, en el partido han tenido como resolución sarcástica despresidencializar al Apra. No hay posibilidades de llegar al poder.
¿Ni siquiera con Alan García al frente?
Allí entramos al sicoanálisis. Quién puede ser el beneficiario de esta crisis: Alan García. Él puede decir que llevó el partido al poder dos veces, pero que a la hora de su segundo mandato encontró al Apra hecho cenizas. Y en el 2016 puede decir que reconstruirá al partido, que es el fabricante del aprismo, el prestidigitador, el hechicero que puede llevarnos de nuevo al poder. Eso es lo que desea. Por eso lanza esas diatribas, atacando a diestra y siniestra.
Jorge del Castillo pidió su licencia a la Secretaría General para resolver la crisis partidaria. ¿Esto tiene un precedente histórico?
No, no. Ninguno. A uno lo eligen como secretario general para que se desempeñe como líder en una campaña electoral. Si luego se pide licencia, eso me parece lo más ilógico y absurdo. Con eso contribuye a generar más caos en el partido.
¿Es el momento más difícil del Apra de los últimos años?
Es el momento más crítico. Tuvimos momentos críticos heroicos, cuando nos persiguieron en el 32.
Pero esta crisis tiene que ver con corrupción…
No diré si es corrupción o no. Entiendo que todos los días hay insultos, imputaciones y denuncias.
¿Cuál es su opinión sobre la crisis que vive el Partido Aprista?
El partido ha dejado de ser un movimiento con posibilidades presidenciales. Ante la falta de un caudillo nacional, el Partido Aprista no tiene más destino que ser como el mariateguismo: un movimiento ideológico, pero sin concreción partidaria poderosa, o un partido parlamentario, que solo puede llegar a ser una gran fuerza en el Congreso.
¿Su visión está ligada a las acusaciones que se han hecho a sus dos secretarios generales?
La bicefalía ha sido muy mala. Ha acentuado las luchas intestinas en el partido y las críticas del antiaprismo. Víctor Raúl decía que había que despresidencializar la Presidencia de la República. Pues bien, en el partido han tenido como resolución sarcástica despresidencializar al Apra. No hay posibilidades de llegar al poder.
¿Ni siquiera con Alan García al frente?
Allí entramos al sicoanálisis. Quién puede ser el beneficiario de esta crisis: Alan García. Él puede decir que llevó el partido al poder dos veces, pero que a la hora de su segundo mandato encontró al Apra hecho cenizas. Y en el 2016 puede decir que reconstruirá al partido, que es el fabricante del aprismo, el prestidigitador, el hechicero que puede llevarnos de nuevo al poder. Eso es lo que desea. Por eso lanza esas diatribas, atacando a diestra y siniestra.
Jorge del Castillo pidió su licencia a la Secretaría General para resolver la crisis partidaria. ¿Esto tiene un precedente histórico?
No, no. Ninguno. A uno lo eligen como secretario general para que se desempeñe como líder en una campaña electoral. Si luego se pide licencia, eso me parece lo más ilógico y absurdo. Con eso contribuye a generar más caos en el partido.
¿Es el momento más difícil del Apra de los últimos años?
Es el momento más crítico. Tuvimos momentos críticos heroicos, cuando nos persiguieron en el 32.
Pero esta crisis tiene que ver con corrupción…
No diré si es corrupción o no. Entiendo que todos los días hay insultos, imputaciones y denuncias.
0 comentarios:
Publicar un comentario